Esta semana desaparecen -o se reinventan- dos herramientas que he utilizado en los últimos años como apoyo a la gestión de marca personal (personal branding): Klout y Storify.
Klout
Polémico desde el inicio, Klout era más conocido por su índice de influencia online, un número entre el 1 y el 100 que indicaba tu «poder» como influenciador, especialmente en Twitter (también medía otras redes). En 2013 publiqué un post en el blog Soymimarca titulado La insoportable levedad de Klout. En el artículo, afirmaba que a pesar de sus errores (muy flagrantes), Klout había llegado para quedarse. Ya ves que como augurero no me voy a ganar la vida. Han pasado 5 años, y Klout ha cerrado esta misma semana.

Tampoco fue visionaria la compañía Lithium Technologies, que compró Klout en marzo de 2014 y que lo cierra 4 años más tarde tras pagar 200 millones de US$.
Lithium afirma que van a construir otra herramienta que supere las imperfecciones de un algoritmo a todas luces mejorable. Claro, no puede ser que a mí me consideraran experto en climatizadores o que a mi colega Eva Collado Durán la vieran como especialista en humidificadores.
Pero para mí, Klout era ante todo una excelente fuente de curación de contenidos. En la página de Klout podías buscar contenidos por temas, y lo cierto es que en #PersonalBranding y #MarcaPersonal era imbatible. Echaré a faltar esta faceta de Klout, aunque desde luego hay muchas alternativas, como el seguimiento de keywords (hashtags) de Hootsuite, menos glamuroso pero igual de efectivo (en la imagen).
En cuanto al índice, fue utilizado por muchas empresas con fines promocionales. Los marketeros entendían que si alguien tenía un índice +70 sería un excelente influencer para probar gratuitamente un servicio o un producto. Además, muchas empresas, especialmente en EE.UU pedían un índice Klout mínimo a sus profesionales de comunicación. Eso se ha acabado.
Por un lado, dar a probar un producto a un influencer tiene sus riesgos (sobre todo si es un mal producto o un influencer tarado). Por otro, tu puedes ser un super-experto en comunicación online que no ha trabajado su propia marca personal en redes; entonces la empresa que no te contrata comete un grave error, ya que puedes manejar mucho mejor las redes que alguien con un índice Klout alto.
En fin, cosa complicada. Lo mejor del índice Klout es que no medía la dimensión de tu comunidad, sino su engagement o nivel de interacción contigo. Eso explica que perfiles con comunidades discretas pudieran tener índices de influencia más altos que «acumuladores» de fans. Con permiso de Ridley Scott, todas esas utilidades se perderán en el tiempo como lágrimas en la lluvia… (hasta que aparezca una herramienta que lime las imperfecciones, posiblemente de pago).
Storify
Esta me duele especialmente, ¿cómo conservaré ahora la memoria de un evento siguiendo hashtags? Storify permitía recoger todo lo publicado bajo un hashtag en un período de aproximadamente tres o cuatro días, lo justo para monitorizar un evento.
Lo cierto es que se limitaba a Twitter (una vez más), el inventor del hashtag, y a Instagram (la perfección del hashtag). Hoy muchas redes sociales como Facebook, Linkedin… permiten (aún han de pulir su software) seguir hashtags. Haz una prueba. Sigue #marcapersonal en Twitter, Instagram, Facebook y Linkedin y verás las diferencias.
Recuerdo un eventazo, el Personal Branding Lab Day en su primera edición de 2015. Tuvo múltiples ecos, pero uno de los más completos (había cerca de 1.000 publicaciones) era el monitorizado por la ya extinta Storify bajo el hashtag #PBLabDay. De eso no queda ya nada en Twitter (de aquel año). En Instagram es más fácil encontrar contenidos.
Estrategia 1, Herramientas 0
Una vez más, se demuestra que todo lo que no esté en tus manos se puede perder. La estrategia es lo que tenemos propio, y las herramientas deben estar a su servicio. No soy el único (mi colega Andrés Pérez Ortega se ha cansado de decirlo) que repite una y otra vez que es mejor publicar en tu propio blog (tu casa digital) que en el de Linkedin. No sabemos cuándo Microsoft decidirá deshacerse, convertirlo en premium o vender su blog Pulse.
Deja memoria de lo que quieras en tus propios medios, no en los ajenos. No te fíes de las herramientas. Muchos, incluyéndome a mí, recogimos nuestra versión del PBLabDay 2015, 2016 o 2017 en nuestro blog. Mientras sigamos pagando el dominio, el hosting y el mantenimiento, ese contenido seguirá ahí aunque muchos de los enlaces (como los de Klout o Storify) estén ya rotos.
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Una lectura recomendada
Uno de mis grandes mentores en lo relativo a Personal Branding es cubano, afincado en la República Dominicana. Mi buen amigo, el profesor Vladimir Estrada, ha publicado un artículo de obligada lectura para todos los que quieran saber qué es y como actúa la marca personal (como resultado) y el personal branding (como proceso) en las empresas. Aquí dejo el enlace, con 34.000 palabras de sabiduría: Marca Personal y empresa: la otra verdad.
Lo curioso es que hace pocos meses estuve en su país y no pude verle por razones de salud. Ahora está recuperado, así que espero estrecharle la mano bien pronto.
Convencido de que todo deja marca, ayudo a empresas a conectar mejor con sus stakeholders a través de programas de personal branding (gestión de marca personal) y employee advocacy (programas de embajadores internos de marca).
Socio de Soymimarca e Integra Personal Branding, Brand Director de Omnia Branding, también colaboro con Ponte en Valor, Brandergizers, MoreThanLaw, Noema Consulting y Quifer Consultores.
Participo en diversos programas en IESE, ISDI y EAE, entre otras. Publicitario colegiado, Master en Marketing. Estudiante del grado de Humanidades.
Mi ADN publicitario viene de 20 años en agencias: Tiempo/BBDO, J.W.T., Bassat Ogilvy, Saatchi & Saatchi, Altraforma y TVLowCost entre otras.
Gracias infinitas por tu generosidad, mi querido amigo y excelente colega Guillem, a quien tanto sigo y de quien tanto aprendo todos los días (y no solo de marca personal y temas afines, sino sobre CÓMO SER UNA GRAN PERSONA QUE ES Y DEJA UNA GRAN MARCA PERSONAL)!
Hay mucho de ti y de tus contribuciones en el trabajo que tan gentilmente has comentado y valorado. Recibe mi abrazo desde el Caribe! Nos seguimos en redes y nos vemos pronto por acá, en tu próximo viaje!
Gracias a ti, Profesor, por ser fuente constante de inspiración y conocimiento. Además, pienso que lo que has escrito y hemos publicado en Soymimarca podría ser un white paper en edición papel. Lo hablaremos en su momento, pero un texto así merece un tratamiento académico. Un abrazo y hasta (espero) dentro de poco tiempo!
Lo cierto es que el cierre de Klout tiene mucho que ver con el auge y caída del concepto ‘gestión de la reputación online’ y la (falsa) creencia de que la reputación se pueda medir matemáticamente para TODAS las audiencias sin distinción como pretendía hacer Klout.
A día de hoy la mayoría de especialistas apuestan por una medición selectiva por ‘stakeholder’ o ‘grupo de interés’, ya que es prácticamente imposible que nuestra reputación tenga una puntuación matemática objetiva inclusiva de todas las audiencias.
Cierto, Oscar. Klout sufría de un exceso de errores, entre ellos tratarnos sin conocer nuestros objetivos ni targets. Seguro que aparecerá una herramienta en el futuro más certera. De momento, como Google Analytics hay pocas. Gracias por escribir!