Según el INE, en España hay
- 1.484.707 García, de los que 82.190 se llaman García García
- 935.931 González, de los que 43.028 se llaman González González
- 933.764 Rodríguez, de los que 44.479 se llaman Rodríguez Rodríguez
- 928.656 Fernández, de los que 53.978 se llaman Fernández Fernández
- 879.868 López, de los que 36.070 se llaman López López
- 841.250 Martínez, de los que 40.333 se llaman Martínez Martínez
- 822.946 Sánchez, de los que 35.769 se llaman Sánchez Sánchez
- 786.515 Pérez, de los que 27.396 se llaman Pérez Pérez
Y podríamos seguir con los Martín, Gómez, Díaz, Hernández, Jiménez, Álvarez, Moreno, Muñoz, Gutiérrez… Yo me llamo Recolons, lo cual también puede considerase una putada (En Cataluña la bromita fácil es llamarnos «Recollons», que hace referencia a la magnitud de los testículos). Pero la parte buena es que solo somos 213, y casi todos emparentados.
¿Qué pasa cuando alguien tiene un apellido muy común? ¿Cómo diferenciarse? ¿Cómo proteger la marca personal?
Hoy estudiamos las posibles salidas para que un nombre muy común pueda ser único. No se pueden hacer milagros, pero hay algunas ideas que quizás podáis aprovechar:
- Utilizar siempre los dos apellidos, de manera inseparable. Es una ventaja que tenemos (y que no funciona en países como Francia, Reino Unido…): Pau García Milá, Gabriel García Márquez, Antonio Garrigues Walker, Miquel Roca i Junyent, Andrés Pérez Ortega…
- Unir el primer apellido con el segundo. El apellido compuesto se utilizaba para que las familias conservaran el apellido materno. Es un tema de registro civil. Si te llamas García Rivero, te podrías llamar García-Rivero. Hay muchos ejemplos: Ruiz-Gallardón, Borbón-Dos Sicilias, García-Valdecasas…
- Colocar el «De» delante del primer apellido. Es algo que se puso de moda en Francia para distinguir a los nobles y que llegó a tener alguna influencia en países de habla hispana. Tenemos un ejemplo actual en el ministro de economía español Luis de Guindos, en mi buen amigo Oscar Del Santo…
- Comerte el primer apellido (siempre que el segundo no sea frecuente): Es algo habitual entre periodistas: Zapatero (por Rodríguez Zapatero), Rubalcaba (por Pérez Rubalcaba), pero no es infrecuente encontrar a personas que han pasado por el registro y lo han solicitado.
- Sistema brasileño. En Brasil el apellido materno va primero, lo cual tiene mucha lógica (no suele haber dudas acerca de la maternidad). Conozco a personas que han invertido sus apellidos para conseguir una mayor diferenciación.
- Simplificar los nombres: Por ejemplo, Pablo Diego José Francisco de Paula Juan Nepomuceno María de los Remedios Crispín Crispiniano de la Santísima Trinidad Ruiz y Picasso es conocido como Pablo Picasso. Imaginaos el trauma del chaval cuando de pequeño alguien le preguntaba el nombre.
- Apodos, marcas comerciales. El caso de una colega de profesión, Arancha Ruiz, lo ha resuelto de maneras interesantes: en Twitter tiene el perfil @alterarancha , cosa que da un toque personal, y ella está unida a su marca comercial «Historias de cracks«
- Aplicar la creatividad. Si te llamas Juan García García y además el tercer apellido es López, la cosa pinta mal, así que habrá que recurrir al pensamiento divergente. Por ejemplo, te podrías plantear un Juan Garcías, un Juan Garcilópez, un Juan Gracia, un Juan G. García, un Juan Dosgarcías,… la imaginación no tiene límites.
¿Y cuál es el siguiente paso? Proteger la marca
Convencido de que todo deja marca, ayudo a empresas a conectar mejor con sus stakeholders a través de programas de personal branding (gestión de marca personal) y employee advocacy (programas de embajadores internos de marca).
Socio de Soymimarca e Integra Personal Branding, Brand Director de Omnia Branding, también colaboro con Ponte en Valor, Brandergizers, MoreThanLaw, Noema Consulting y Quifer Consultores.
Participo en diversos programas en IESE, ISDI y EAE, entre otras. Publicitario colegiado, Master en Marketing. Estudiante del grado de Humanidades.
Mi ADN publicitario viene de 20 años en agencias: Tiempo/BBDO, J.W.T., Bassat Ogilvy, Saatchi & Saatchi, Altraforma y TVLowCost entre otras.
Mis apellidos no son precisamente comunes y el primero son de aquellos que facilitan la bromita…Además solo hay dos personas que se llaman como yo, una argentina y yo. Por contra modifico mis apellidos en las redes sociales y las privatizo (excepto en linkedin que está tal cual) porque en el buscador sería muy fácil de encontrarme y eso puede acarrear problemas, por ejemplo si te vigila tu jefe (en cambio, pones juan garcía en el facebook y te salen 400….)
Hola Lambda, imagino que tu circunstancia te ha movido a crear tu propia estrategia de marca. De alguna manera, prefieres mantener cierto camuflaje con un nickname que mueves por las RRSS.
No es una mala idea, pero si necesitas un posicionamiento profesional en red tendrás que tomar una determinación sobre un único nombre. Espero que te sirvan las pistas del post.
Gracias por escribir
Gracias por el artículo, Guillem.
Como sabes, mi primer apellido es Rodilana, y actuamente en España solamente hay 93 personas con este, como su primer apellido. Evidentemente todas son familiares míos.
Para mí, es una suerte tener un apellido único, como usted, señor Recolons, por el cual somos fácilmente reconocibles, y podemos crear alrededor de nuestro nombre una marca propia.
Además, respondiendo a Lambda, que tengas un nombre único y puedan encontrarte fácilmente, no es algo negativo, sino todo lo contrario.
Cuando alguien quiere buscarte en las redes sociales, tarde o temprano te acabará encontrando. Todo es cuestión de tiempo. Si tienes algo que esconder, tarde o temprano te habrán pillado, y si tienes algo que ganar, como un puesto de trabajo, si es más difícil encontrarte, quizás cuando lo hagan, sea ya tarde.
Así que, no me parece una mala idea usar la imaginación cuando nuestro nombre es muy común para adornarlo un poco y hacerlo único, aunque creo que lo más importante es crear nuestra propia marca y si, esta es digna de recordar, no será necesario que nuestro nombre sea diferente o raro.
Un saludo.
Gracias Don Andrés, es cierto que un apellido tan exclusivo facilita las cosas, pero imagina que el apellido es «Lelo» (en España hay 16).
Puedes optar por aceptarlo y jugar a esa exclusividad, o si te molesta la bromita permanente, puedes optar por algunas de las técnicas expuestas en el post.
Quiero entender que éste último sería el caso de «Lambda», cuyo apellido no conocemos pero que él prefiere esconder.
Gracias por escribir
Hola, soy Fernández, Luis Fernández. Y con este nombre tan vulgar, además, hay varios famosos: Ex-futbolista y ex-entrenador de fútbol, ex-director de TVE, actor y escritor venezolano, actor español, y un sinfin de luisesfernandezes de a pie.
En efecto, yo me apliqué el primer punto, y aún así, hay unos cuantos: un ingeniero que da nombre a un viaducto en la A-6 sobre Ponferrada, una calle en Bilbao (desconozco la biografía del homenajeado). Y para más inri, cuando quise buscar mi nombre completo «Luis Fernández del Campo», resulta que ya había un concesionario de coches mexicano con ese nombre (y dominio en internet ocupado). En todo caso, mi caso es el del punto 1.
Afortunadamente, mi actividad digital es muy superior a la de todos ellos, y he logrado que mi marca sea fácilmente encontrable, y reconocible.
Un saludo,
Luis Fernández
Hola Luis, está claro que el tuyo es un caso de nota alta. Has conseguido además reservar el @luisfernandez en Twitter.
Sería más que interesante que un día puedas contar en tu blog o tus redes todas las anécdotas sobre tus «clones».
Un saludo!
Hola Luis, Por si te interesa, el Fernandez del Campo de Bilbao fué el Marqués de la Mejorada.
Saludos
Hola Guillem,
Mucha miga tiene este asunto… y es que cuando hablamos de marca personal, nuestro nombre y apellidos constituyen un aspecto fundamental, a no ser, claro está, que podamos permitirnos adquirir un seudónimo o nombre de ficción, caso de gente del cine o de otras artes, por ejemplo. Y es que, en mi opinión, en términos de Personal Branding, nuestro nombre, nuestros apellidos, es como decir Mac Donald o Coca Cola, y como estas marcas hacen tenemos que preocuparnos de tener un «buen nombre», original y sin imitaciones…, a ser posible. En mi caso, a pesar de apellidarme Fernández de primero, de segundo tengo ALBERTI, mucho más singular y con la particularidad de ser apellido de famoso poeta, evidentemente es este el que me encargo siempre de remarcar (muchas veces incluso en mayúsculas), de acompañar a mi nombre, en mis perfiles, etc.. Un ejemplo, mi Twitter es @ignacioFALBERTI
Como dice Guillem, yo creo que antes de hacer nada en las redes primero pensar en el nombre que vais a trabajar… el tema del escoger dominios y registrarlos es básico. Del mundo online hay pocas cosas que se seguras al 100 por 100, esta es una.
Hola Ignacio, eres un buen ejemplo de marca, has sabido encontrar tu hueco a pesar de lo frecuente del primer apellido. Lo de Alberti está muy bien, como dices le da un aire poético al tema.
Hola a todos,
Mi nombre completo es Montse Fabra Homedes, combinación poco común, pero mucho menos que Montse Fabra, y aunque mi búsqueda en la red no se complica demasiado puesto que soy la montse fabra que más presencia tiene (pudiendo cambiar esta circunstancia en cualquier momento), he preferido sacrificar un poco de visibilidad, eliminando el segundo apellido, buscando una distinción más visual (mONTSEFABRA) creando mi logo de este modo por la facilidad que conlleva insertar tu «logo» en cualquier post en la red, simplemente invirtiendo las mayúsculas/minúsculas. La pregunta es: ¿estoy camuflándome? de posibles candidaturas de trabajo? (soy freelance, por lo que es tema signifiativo) ¿o el nombre y un apellido (a parte de encontrarte con que google te pregunte aquello de «did you mean…» es suficiente para el rastreo junto con el impacto visual del juego de mayúsculas/minúsculas?, es decir; ¿es más imperativo el rastreo (incluyendo el 2º apellido) o el impacto visual buscando ser recordado?. Por cierto, la opción de mONTSEfABRAhOMEDES no me la planteo jeje. Mucha gracias.
Un saludo,
Montse Fabra Homedes
Hola Montse, para serte muy sincero, tu nombre ya es único, así que no necesitas diferenciarlo en la forma. Esta es una gran ventaja de partida, ya que te permite trabajar más el fondo, tu pasión por la moda, el diseño, el estilo, el arte.
Piensa que los e-mails o los perfiles de Twitter, por ejemplo, no distinguen mayúsculas de minúsculas. Pero tu blog es brutal, un alegato a la creatividad y a lo visual. Tienes una buena marca, en forma y fondo.
Gracias por escribir!
Buenas tardes,
Me viene como anillo al dedo este tema porque siempre he tenido dudas sobre cómo utilizar mis apellidos. Os cuento, me llamo María Pérez Macías. Siempre he intentado utilizar los dos apellidos pero me he dado por vencida porque finalmente todo el mundo me conoce por María Pérez. pero no queda ahí sino que tengo un grupo de amigos y conocidos que ese nombre lo han transformado en Maripé y se ha convertido casi en mi nombre de pila para ellos. Les dices Maria y no saben quien es pero si dices Maripé estoy toalmente identificada.
Guillem entiendo que podría utilizarlo como marca personal, no?pero sinceramente me parece poco serio… o no?
Para mi web, después de darle mil vueltas y condicionada por los registros disponibles en mi empresa, utilizo «marpe».
Saludos y gracias por tus aportaciones, siempre interesantes.
Hola Guillem, un artículo muy interesante.
Al igual que a Luis Fernandez mi combinación de nombre y dos apellidos no solo es muy común (David Gómez Ramírez) sino que lo comparto con un director y compositor sevillano, un atleta de élite, un arquitecto, un dj, un diseñador, un médico… Y no digamos nada si solo se busca «David Gómez»
En mi caso pude conseguir el url davidgomez.eu, uní el nombre a una marca y cree un blog y varios perfiles. Actualmente, si se busca mi nombre y dos apellidos mis perfiles de línkedin y vimeo aparecen en la primera página y el google+ en la segunda. Si se busca por David Gómez he logrado subir de la página 40 a la página 3.
Saludos
David, felicidades! Lo has trabajado de forma impecable. El tema de Google siempre es el más difícil, pero si sigues trabajando contenidos (veo que vas a un ritmo de aprox. 2 posts/semana) irá mejorando de manera orgánica (la mejor) la posición hasta llegar a la primera página. Estás en creative commons, lo cual ayuda a compartir, gran decisión.
Si me permites el atrevimiento en forma de pequeño consejo SEO, el invitar a algún autor externo como «guest blogger» te puede ayudar muchísimo. También el colocar tu nombre completo (incluyendo el Ramírez) en la home de tu blog -recuerda que es TU blog, y tratar de utilizar siempre el 2º apellido. David Gómez puede haber muchos, pero David Gómez Ramírez seguro que hay muy pocos.
Un saludo y gracias por escribir!
Guillem
Hola Guillem, ningún atrevimiento. Los pondré en práctica en breve.
Muchísimas gracias.
Pues yo debo tener mala suerte porque me apellido Fernández García… ¿soluciones? XD
Hola, ¿Quieres una buena noticia? El dominio http://www.fdezgarcia.com está libre. A por él!!
Gracias por escribir
Estimado Guillem.
Excelente tu post, me ha encantado. Te sigo desde Buenos Aires y, sí, es complicado crear marca con nuestros nombres.
En mi caso, tengo dos nombres de pila pero opté por el primero y del acta de nacimiento ambos apellidos.
Sin embargo, todavía estoy pensando en mi cuenta de Twitter. Me gustaría San Martín, por la connotación que el General San Martín ha tenido en América y principalmente en mi país, pero en varios idiomas existe tornándose muy común.
Considero que lo mejor será @EPSM puesto que suelo usarlo como «firma» en correos electrónicos y mis contactos ya me identifican.
Recibe un saludo desde Argentina
EPSM
Guilem
Simplement genial.
Una abraçada ben forta.
Pau Hortal
Mil gràcies, Pau!
Et torno l’abraçada